The Squishy Swordsman with Zero Attack Power Abandoned by His Childhood Friend Oracle, He Entered the Magic Academy, and Ended Up Looking After the Demon Lord - 96. Epilogo del Arco 4

 

"……"

 

Desperté y lo que entró en mi visión fue un techo blanco liso, una pared blanca y cortinas blancas.

 

(¿Esta es… la enfermería de la academia…?) (Eugene)

 

Que la enfermería tenga mucho blanco se debe al gusto del profesor.

 

Vengo aquí a menudo… es lo que pensaba.

 

La enfermería de la Academia de Magia Lykeion tiene mejor equipamiento que un gran hospital, así que este es el primer lugar al que llevan a los estudiantes heridos.

 

Me duele un poco la cabeza.

 

Mi cuerpo está lento y pesado.

 

Mi memoria está borrosa.

 

¿Por qué estoy aquí…?

 

"……Eugy? ¡¿Te has despertado?!"

 

Una voz que estoy acostumbrado a escuchar, pero es nostálgica.

 

Una voz que escucho más a menudo fuera de los sueños.

 

"…¿Airi?" (Eugene)

 

Los ojos azules de mi amigo de la infancia estaban a punto de llorar.

 

"¡Me alegro mucho! Cami, ¡diles a todos que Eugy se ha despertado!" (Airi)

 

"Sí, Airi-sama." (Camilla)

 

Oigo el sonido de pasos cada vez más lejos.

 

"¿Perdí el conocimiento?" (Eugene)

 

"Es cierto. Estaba preocupado porque no te despertaste en todo el día. Estuvimos todo el tiempo a tu lado con Sumire-san y Sara-san por turnos." (Airi)

 

"¿Tan lejos…? Realmente me preocupaban esos dos…" (Eugene)

 

Me levanté lentamente mientras me preguntaba "¿Tan cerca estaba Airi de esos dos…?".

 

Y entonces, fui recuperando la consciencia poco a poco.

 

Cierto.

 

Estaba luchando junto con el Director Uther y el 1er Caballero Clair-sama…

 

"Hablando de eso, ¡¿Cuál fue el resultado de la prueba…?!" (Eugene)

 

Pregunté apresuradamente y Airi mostró una expresión de sorpresa.

 

"¿Qué estás diciendo, Eugy? ¿No te acuerdas?" (Airi)

 

"Uhm… se volvió blanco puro con la magia de hadas de Clair-sama, y después de que el Director Uther me llevara con Teletransporte…" (Eugene)

 

"Has superado con éxito la Disciplina Deus. Tiraste una cabeza de Hidra con tu extraña Hoja de Maná, ¿cierto? Hey… ¿qué era esa Hoja de Mana? Pensé que se parecía a la Hoja de Maná que usaste cuando derrotaste a Cerberus… Pero sentí una sensación aún más aprensiva de ella…" (Airi)

 

"O-Oh bueno, ¡eso no importa!" (Eugene)

 

Lo dejé vago.

 

"Además, he oído que estás saliendo con otra mujer aparte de Sumire-san y Sara-san…" (Airi)

 

"No sé de qué estás hablando…" (Eugene)

 

"…"

 

"…¿A-Airi?" (Eugene)

 

Airi me miró fijamente.

 

"Parece que ocultas algo". (Airi)

 

Casi no ha habido casos en los que haya podido mentirle a Airi cuando éramos jóvenes.

 

Desvío la mirada.

 

Oigo varios pasos procedentes del pasillo.

 

Esta forma de correr…

 

"¡¡Eugene-kun!!"

 

"¡¡Eugene!!"

 

Realmente eran Sumire y Sara.

 

Las dos me abrazan sin más.

 

Airi se alejó un poco de mí como cediendo el paso.

 

"¡Estaba preocupada! No te despertabas para nada". (Sumire)

 

"Haah, realmente eres imprudente." (Sara)

 

"Lo siento, a las dos. Las he preocupado a las dos". (Eugene)

 

Me abracé a los hombros de los dos después de pensarlo un poco.

 

Siento una intensa mirada de mi amigo de la infancia.

 

"Eugene Santafield-dono, ¿tienes un poco de tiempo?"

 

Pensé que Airi era la única que me miraba fijamente, pero un hombre desconocido me habló.

 

A juzgar por su atuendo, parece que es personal de la mazmorra.

 

"¿Qué pasa?" (Eugene)

 

Pensé por un momento que tal vez mi contrato con el Señor de los Demonios había sido descubierto, pero el jefe de la Alianza de Mazmorras es el Director Uther.

 

Él debe haber movido algunos hilos… creo.

 

¿Cierto, Director Uther?

 

"¡Ha habido muchas llamadas de todas las naciones con respecto a la cabeza de Hidra que cortaste! La cabeza de la Bestia Divina que tiene veneno mitológico fatal. ¡No hay duda de que es un material legendario! ¡Por favor, permítanos el derecho de subastarla a través de la Alianza de Mazmorras! ¡La Alianza ha almacenado la cabeza de la Hidra y su piel desechada! ¡Ahora, ahora! Por favor, firme aquí!"

 

Parece que su objetivo eran los materiales de la Bestia Divina.

 

Hablando de eso, fue lo mismo con Cerberus.

 

"Uhm, sólo tengo que firmar aquí, ¿verdad?" (Eugene)

 

Tomé la pluma y estaba a punto de escribir mi nombre, pero…

 

"¡Es-Espera, Eugy!" (Airi)

 

"¡Un momento, Eugene!" (Sara)

 

Airi y Sara me detuvieron.

 

"¡¿Está bien firmar tan fácilmente?!" (Airi)

 

"Bastante se tomará en honorarios". (Sara)

 

"¡Los materiales de una Bestia Divina pueden alcanzar cientos de millones de G!" (Airi)

 

"¡Piénsalo con más cuidado!" (Sara)

 

Me acorralaron por ambos lados.

 

Como era de esperar de la próxima Emperatriz y Santa Doncella, las dos son muy estrictas cuando se trata de oro.

 

Sumire parece no estar interesada en esto, no se une a la conversación.

 

Yo estoy igual que Sumire.

 

"Parece que el contrato es el mismo que la última vez, y los ojos del Director Uther están puestos en la Alianza de Mazmorras, así que no hay trampas raras. No debería haber problemas". (Eugene)

 

Digo esto, firmo el contrato y se lo doy al personal de la mazmorra.

 

"¡Muchas gracias! ¡¡Tienes nuestra gratitud, Eugene-san!!"

 

Estaba casi a punto de salir saltando.

 

Por favor, véndelo a un precio alto, ¿vale?

 

"Airi-sama, ya casi es hora de que el Barco Volador parta". (Camilla)

 

Camilla vino a llamar a Airi.

 

"¡¿Eh, ya?! ¡Eugy se acaba de despertar!" (Airi)

 

"La promesa era quedarte hasta que Eugene-kun despertara para empezar, y te quedaste 1 día más". (Camilla)

 

"¿De verdad?" (Eugene)

 

"Es cierto, Eugene-kun. Airi-sama se ha quedado contigo desde el día hasta la noche. Nosotros los guardaespaldas fuimos-mgh." (Camilla)

 

"¡Cállate!" (Airi)

 

Airi tapó la boca de Camilla.

 

"Gracias, Airi." (Eugene)

 

"¡¡Está bien!! Sólo lo hice porque quería de todos modos!" (Airi)

 

Airi miró hacia otro lado.

 

Sus modales no han cambiado.

 

"Siento no haber tenido tiempo para hablar". (Eugene)

 

"He dicho que está bien. Ya te sientes mejor, así que vuelve al Imperio de nuevo, ¿vale?" (Airi)

 

Airi sonreía suavemente, desprendiendo una atmósfera aún más madura que antes.

 

"……"

 

"……"

 

Sumire y Sara miraban fijamente hacia aquí.

 

Siento que se van a quejar de esto más tarde.

 

"Tengo que irme ya". (Airi)

 

"Ten cuidado, Airi." (Eugene)

 

Estaba a punto de levantarme de la cama y despedirme de ella.

 

"Idiota, quédate ahí. Eres un paciente." (Airi)

 

Airi me detuvo.

 

"Sí, lo haré." (Eugene)

 

Terminé diciendo eso.

 

Fue tan natural y casual.

 

El rostro de mi amiga de la infancia estaba cierto frente a mis ojos para cuando me di cuenta.

 

-Y ella me besó.

 

Sus labios se separaron de los míos.

 

"……Eh?" (Eugene)

 

"¿Hm? ¿Pasa algo, Eugy?" (Airi)

 

Mi amiga de la infancia me miró boquiabierta, como diciendo "¿ha pasado algo?".

 

"Justo ahora… ¿qué has…?" (Eugene)

 

"Qué, enfadarte sólo por esto. Has estado jugando con muchas mujeres en la academia, ¿verdad?". (Airi)

 

¡E-Eso no es verdad! -es lo que quería decir pero no pude.

 

"…E-Escucha aquí, Airi…" (Eugene)

 

"See you later" (Te veo luego)☆." (Airi)

 

Airi me guiñó un ojo con cara pícara y salió de la enfermería.

 

…*Rumble Rumble Rumble Rumble Rumble Rumble*

 

El aire tiembla… literalmente.

 

Es el mana del Ifrit Sumire.

 

La mano de Sara tenía su brillante Espada Sagrada desenvainada.

 

"¡Por favor esperen, ustedes dos!" (Eugene)

 

"¿Esperar para qué~? ¿A Eugene-kun que besó a Airi-chan?" (Sumire)

 

"Vaya vaya, Eugene, ¿cuándo arreglaste las cosas con tu amiga de la infancia?". (Sara)

 

"¡No es eso! Yo también estoy sorprendido…" (Eugene)

 

"Ha sido un beso muy natural. Debes haber estado todo besucón con Airi-chan a nuestras espaldas, ¿verdad? No me enfadaré, así que intenta decir cuántas veces lo has hecho". (Sumire)

 

Estaba a punto de responder con un "¡Sólo una vez!" a la pregunta de la sonriente Sumire, pero de repente me doy cuenta…

 

(¿También se incluye el beso que nos dimos de niños?) (Eugene)

 

Recuerdo la vez que nos besamos de broma cuando apenas teníamos 10 años.

 

"Podría ser…Eugene…" (Sara)

 

El brillo de la Espada Sagrada de Sara se hizo cada vez más agudo.

 

Esa forma de acumular mana es peligrosa.

 

"Eugene-kun, di lo que escondes." (Sumire)

 

"Eugene, promete a esta Espada Sagrada que dirás la verdad". (Sara)

 

Las dos dan miedo.

 

Un círculo mágico apareció en el aire de repente.

 

"Ooi, Eugene, parece que te has despertado. Clair-kun y Lloyd-kun estaban preocupados por ti, así que dijeron que aparecieras cuando te sintieras mejor… espera, ¿qué estás haciendo?"

 

El que apareció en la enfermería con Teletransporte fue el Director Uther.

 

Llevaba un libro mágico bajo el brazo y portaba papeles con su estilo habitual, así que debió de venir a ver cómo estaba entre su trabajo.

 

Lo que el Director Uther vio fue a la Ifrit Sumire con su cabello erizado y enrojecido por el mana rojo, a la próxima Santa Doncella Sara preparando su brillante Espada Sagrada, y a mí que estoy acorralado y acurrucado en la cama.

 

Fue entonces cuando el sabio director comprendió la situación en un instante.

 

"Un beso no es para tanto. Eugene es el Héroe Legendario que salvó a la Academia de la amenaza de una Bestia Divina". (Uther)

 

Eso fue demasiado específico, así que debe haber visto el pasado con ojos mágicos.

 

"¡No está bien, Director!" (Sumire)

 

"¡Si mimas a los hombres de esa manera, acabarán convirtiéndose en holgazanes!" (Sara)

 

Sumire y Sara hicieron un "¡Kiih!" y fulminaron al director con la mirada.

 

Él simplemente se rió ante esto.

 

"Parece que a Eugene le falta maná debido a su lucha contra la Hidra. Lo más probable es que su recuperación se acelere si alguien le compartiera su mana". (Uther)

 

""?!""

 

Actuaba como si hablara consigo mismo, pero esa afirmación iba dirigida a Sumire y Sara.

 

"¡¿P-Principal?!" (Eugene)

 

Tuve un mal presentimiento. Quería retirarme, pero ya era demasiado tarde…

 

"Entonces, asegúrate de aparecer en la Alianza Dungeon cuando te sientas mejor. Santo cielo, estoy tan ocupado por culpa de este caprichoso Dungeon Master". (Uther)

 

\’Tanto trabajo, tanto trabajo\’ -es lo que dijo el Director como divirtiéndose por alguna razón y se fue con Teleport.

 

Que persona tan ocupada.

 

*¡Click!*

 

Escuche ese sonido.

 

Sumire cerró la puerta de la enfermería.

 

Del otro lado…

 

*¡Swish!*

 

Sara cerró las cortinas.

 

"Uhm… ¿Sumire… Sara…?" (Eugene)

 

Los dos vinieron hacia aquí con sonrisas en sus rostros.

 

"Aha☆."

 

"Fufu♡."

 

Los ojos de los dos sonriendo tiernamente eran los de un depredador.

 

La cama cruje un poco por el peso añadido de dos personas.

 

"Esto es enfermería…" (Sumire)

 

"Para que te mejores más rápido…" (Sara)

 

"Gracias… a las dos." (Eugene)

 

Me resolví después de ver la expresión acalorada de ambas.

 

Y así, tuve mi maná \’repuesto\’ por las dos.

 

…Fue terriblemente intenso ser llamado enfermero sin embargo.

 

◇◇

 

"Hmm, ¿así que te olvidaste de mí porque estabas tratando con dos mujeres?".

 

"N-No, no es que me haya olvidado. Por supuesto, fue gracias a ti que logramos derrotar a la Hidra, Eri." (Eugene)

 

Me disculpo con el Señor de los Demonios que está de mal humor.

 

La enfermera de la enfermería me dijo que estaba bien volver a mi estilo de vida, así que inmediatamente fui a la Prisión del Séptimo Sello.

 

Conseguimos luchar contra la Bestia Divina gracias al 4º maná que tomé prestado de Eri.

 

Para mostrar mi agradecimiento…

 

"Ven aquí ya." (Eri)

 

"Entendido." (Eugene)

 

Me acerqué a Eri después de que me hiciera señas… y me empujó hacia la cama.

 

La hermosa y escalofriante Erinyes me miraba directamente.

 

"Hmm, parece que el mana ultra violeta… no está erosionando tanto tu cuerpo." (Eri)

 

Eri tocó todo mi cuerpo como si lo estuviera comprobando.

 

"¿Así que realmente… era un poder peligroso para la gente?" (Eugene)

 

"El mana ultra violeta es un elemento asesino de dioses. Pierdes la protección divina de las Diosas cuanto más lo usas, y eventualmente caes en el mal. Eugene, intenta extender tu ala de ángel". (Eri)

 

"No puedo usar mi ala normalmente…" (Eugene)

 

"¡¿Acabas de conseguir una y otra vez maná de la Santa Doncella, verdad?! Lo sé, ¡así que no lo escondas! ¡Vamos, sácalo! ¡Rápido, rápido!" (Eri)

 

No puedo ocultarle nada al Señor de los Demonios.

 

O más bien, no pude hacerlo con mi amiga de la infancia, y no pude con Sumire y Sara.

 

Puede que sea realmente mala ocultando cosas.

 

Extiendo el mana del ala.

 

El ala es blanca pura como siempre… o no.

 

"¿Q-Qué?" (Eugene)

 

"Aah, realmente se está volviéndose negra." (Eri)

 

La punta de mi ala está débilmente negra.

 

"Hey, Eri, es esto…" (Eugene)

 

"La prueba de un ángel caído". (Eri)

 

"…"

 

Sudor frío salió.

 

¿No es esto… malo?

 

"Volverá a ser blanco de nuevo si lo dejas estar. Por cierto, no has escatimado en rezar a las Diosas, ¿verdad?". (Eri)

 

"Las venero una vez cada 7 días… técnicamente." (Eugene)

 

"¡Tan poco!" (Eri)

 

Eri estaba desconcertada.

 

El número de oraciones que hacía se redujo desde el momento en que obtuve mi talento.

 

Sin embargo, saludo a mi madre en el Reino Divino todos los días.

 

"Intentaré rezar más". (Eugene)

 

"Hazlo. Pero hay algo más que tienes que hacer hoy. Sabes a lo que me refiero, ¿verdad?" (Eri)

 

La mano de Eri toca mi mejilla.

 

Esa mano es fría, suave, y trazó su camino desde mis labios hasta mi pecho.

 

Mi ropa se había abierto cuando me di cuenta.

 

Eri me miraba como una bestia carnívora y se relamía.

 

"¿Eri-san? Acabo de recuperarme así que…" (Eugene)

 

"No puedo permitir que esas mocosas sigan marcándote. Tengo que hacerles entender a quién perteneces". (Eri)

 

Ella está seria.

 

"Por favor, sé amable." (Eugene)

 

"Nope☆." (Eri)

 

La cara sádica de Eri se acercó a mí.

 

…Siento que perdí más resistencia aquí que cuando luché contra la Bestia Divina.

 

 

◇Unos días después◇

 

La Ciudad Mazmorra está prosperando.

 

Aparentemente es raro que haya más gente después de que termine el festival escolar.

 

La razón es debido a las reglas renovadas de la Torre Zenith por el Dungeon Master.

 

Es porque hay rumores de que los desafíos contra las Bestias Divinas se han vuelto más fáciles de lo normal.

 

La fuente del rumor es la propia Dungeon Master.

 

Ella aparentemente tiene un anuncio que hacer a través del Sistema Satelital.

 

A los estudiantes de la Academia de Magia Lykeion se les ha limitado la entrada a la Torre Zenith temporalmente.

 

Es por la preocupación de situaciones irregulares.

 

Los exploradores por otro lado estaban pensando \’¿no es esta una oportunidad para dar un gran golpe?\’ y hay más de ellos reunidos que de costumbre.

 

La batalla contra la Hidra Bestia Divina del otro día.

 

Aparentemente había mucha gente motivada por esto.

 

En cuanto a mí, me abstendría de luchar contra la Hidra una vez más si me preguntaran.

 

Probablemente es difícil transmitir la desesperación a través de la pantalla.

 

Parece que la impresión de la magia del Director Uther y la Hoja de Maná del 1er Caballero-sama se impusieron.

 

Al parecer hay exploradores que decían "¡Yo también puedo hacerlo!" debido a que un estudiante de la academia le cortó la cabeza a la Hidra.

 

No ha habido bajas hasta el momento.

 

Y así, un montón de exploradores han abarrotado la Alianza Dungeon.

 

Los estudiantes de la academia están viendo cómo se desarrollan las cosas.

 

Ese es el estado actual de las cosas.

 

Me he recuperado completamente, así que estaba tomando clases junto con Sumire en el Departamento Normal, pero el director Uther apareció en la clase de repente.

 

"¡Eugene, Sumire-kun, vengan conmigo de inmediato!" (Uther)

 

"O-Okay. Qué repentino". (Eugene)

 

"Vale~, vamos~." (Sumire)

 

Sumire y yo salimos del aula sin más.

 

Pensaba que iríamos con Teletransporte, pero parece que vamos a ir andando.

 

El director Uther subió las escaleras y caminamos por una parte de la academia a la que normalmente no voy.

 

"Director Uther, ¿qué pasa?" (Eugene)

 

"Pronto lo sabrás". (Uther)

 

Le pregunté, pero me esquivó.

 

Dicho esto, el director Uther no dice nada sin pensar, así que lo más probable es que realmente seamos capaces de saberlo rápidamente.

 

"Ahora bien, estamos aquí." (Uther)

 

Estábamos en frente de una sola aula.

 

Es mi primera vez aquí.

 

Director Uther abrió la puerta y entró.

 

""…""

 

Sumire y yo nos miramos.

 

No hubo ninguna explicación, pero supongo que quiere que le sigamos.

 

Es la primera vez que entro en esta aula.

 

Es completamente diferente al gran auditorio en el que Sumire y yo tenemos clase.

 

No es un aula con capacidad para más de 100 personas, sino una en la que caben unas 30 personas.

 

No son pupitres compartidos, sino pupitres grandes para cada persona.

 

No son pupitres de madera sin respaldo, sino sillas grandes con respaldos acolchados.

 

Y los alumnos de esa clase llevaban todos los atuendos que querían en lugar del uniforme de la academia.

 

Estoy familiarizado con ellos.

 

Al fin y al cabo, todos y cada uno de ellos acabarán siendo personas influyentes del Imperio, la Unión Sagrada y la Federación de las Aguas Azules.

 

"Hola, Eugene. Por fin estás aquí".

 

Un hombre me habló despreocupadamente.

 

Parece que también se ha recuperado de sus heridas del otro día.

 

"Bienvenido, Eugene, Sumire-chan."

 

La que dijo eso era la presidenta del consejo estudiantil, Sara.

 

"¿Eh? ¿Eh? ¿Eh? ¿Sara-chan? ¿Claude-kun?" (Sumire)

 

Que estos dos estén aquí… debe significar eso.

 

Tenía la sensación de que sería así, pero parece que Sumire no.

 

Miro al director Uther, pidiéndole una explicación.

 

Ya no tiene sentido ocultarlo.

 

El director Uther anuncia con sus habituales gestos teatrales.

 

"Estimados miembros del Departamento Legendario de la Academia de Magia Lykeion, permítanme presentarles a sus nuevos compañeros de clase¡! Eugene Santafield y Sashiogi Sumire-kun. Asegúrense de llevarse bien". (Uther)

 

(Haah…) (Eugene)

 

Suspiré en mi mente.

 

"Eeeeeeeeeeeeh?!!!!" (Sumire)

 

La fuerte voz sorprendida de Sumire sonó en el aula.

 

-Así es como Sumire y yo acabamos \’cambiando de clase\’.