Fourth Prince - 668. La conquista del Héroe (1)_

"¿Se ha ido?" preguntó Raven en cuanto Ysnay desapareció.

Asentí con la cabeza y le sonreí, frotando su pelo con suavidad.

"Gracias. Me has salvado".

"Nn… me alegro de haberte ayudado". Dijo Raven tímidamente y me agarró la mano. "¿Terminaste tu batalla con ella?"

Asentí y puse una expresión de impotencia.

"Pero como has oído, parece que ha conseguido ganar sin que me diera cuenta. Aunque a juzgar por sus palabras, no fue una victoria completa".

"¿Podría haber estado mintiendo?" preguntó Raven con dudas.

Me lo pensé un momento antes de sacudir la cabeza y suspirar.

"No lo creo. Lo único que conseguirá Ysnay diciendo algo así es que me dé más guerra. No tiene sentido hacer eso. Además… tengo la sensación de que no está mintiendo".

"¿Qué vas a hacer entonces, hermano mayor?"

Sonreí con ironía y me encogí de hombros.

"¿Qué puedo hacer? Sólo puedo esperar a que Ysnay muestre su mano. Antes de eso, no hay nada que pueda hacer".

Raven asintió con una expresión complicada.

"Si necesitas mi ayuda, dímelo".

"Lo haré". Me reí y besé sus labios suavemente, haciendo que la chica gato se sonrojara.

Justo cuando estaba a punto de besarla de nuevo, oí un gemido detrás de mí.

Cuando me giré, vi a Rose de pie con el ceño fruncido y una expresión confusa.

"¿Qué ha pasado?" Preguntó mirándome.

Pero un segundo después, su expresión se volvió blanca como la ceniza.

"Yo… yo… yo… ¿qué he hecho?"

"Rose…"

"C-Claus, juro que no quería hacerte daño. Tienes que creerme. No he sido yo".

Dejé escapar un pequeño suspiro y atraje a Rose entre mis brazos, abrazándola con fuerza.

"Lo sé, lo sé. Cálmate".

"P-Pero…"

"No fue tu culpa. Ysnay te manipuló contra tu voluntad. No te preocupes, lo sé".

"¿De verdad? ¿No me odias?"

"Por supuesto que no." Me reí y tomé su barbilla, levantándola ligeramente y plantando un beso en sus labios. "¿Por qué iba a odiar a mi querido Héroe? No seas tonto".

Rose me miró con expresión aturdida, y luego, sus ojos se llenaron de lágrimas.

"Gracias…" Murmuró suavemente y puso su cabeza en mi pecho.

En ese momento, vi que Raven nos miraba y sonreía. La chica gato soltó una risita y habló en mi mente.

[Os dejaré solos a los dos. Disfrútenlo].

Luego atravesó el espacio y se fue.

Esta chica…

La recompensaré definitivamente esta noche.

Ahora, sin embargo, mi prioridad es el héroe en mis brazos.

Continué abrazando a Rose en mis brazos mientras besaba su lustroso cabello negro. Finalmente, Rose apartó la cabeza de mi pecho y me miró a la cara con expresión aturdida.

Al ver eso, no pude aguantar más.

Ahora que la situación de Ysnay había terminado, no necesitaba seguir reprimiendo mis deseos.

Sin dudarlo, le planté un beso en los labios.

Pero este beso fue muy diferente al anterior. En cuanto nuestros labios se tocaron, fue como si nuestros cuerpos se lanzaran al fuego. Nuestra pasión se encendió al instante mientras buscábamos la boca del otro con desenfreno.

Cuando nuestro beso terminó, Rose puso una expresión tímida y nerviosa. Tal vez debido a su vergüenza, intentó zafarse de mi abrazo, pero la agarré de la muñeca y la atraje hacia mí de nuevo.

"¿Ah?"

Ella volvió a entrar en mi agarre mientras yo abrazaba su cintura con fuerza, apretando su cuerpo contra el mío.

Rose giró la cabeza y me miró.

"Claus…"

Un cuerpo hermoso, con el pelo negro como el carbón y los ojos tan oscuros como la noche misma.

Pero ahora mismo, sólo mi rostro se reflejaba en sus ojos oscuros.

"¿Qué pasa?" Le pregunté.

"… ¿Me quieres?" Preguntó con una expresión nerviosa e insegura, como un cachorro que teme que su dueño le eche.

Su expresión me pareció increíblemente tierna. Pero no respondí.

En su lugar, la besé de nuevo.

Nuestros labios se tocaron. Se pegaron como si no pudieran separarse.

"Mm… mm…"

Un débil sonido de respiración se filtró.

Los dos intercambiamos alientos durante un rato. Introduje mi lengua y lamí sus encías, haciendo que Rose soltara un "Ah" sobresaltado. Antes de que pudiera terminar de soltar ese ruido, introduje mi lengua por completo.

"Auh… mm, ah… mm, mmm…"

La saliva se deslizó por el lado de la boca de Rose lentamente hasta su nuca. Entonces llevé mi boca a su cuello y lo lamí. Una vez que la punta de mi lengua rozó el cuello de Rose, su voz se debilitó.

"Huu… ha."

Aunque sólo era su nuca, Rose estaba muy sensible. ¿Se debía a su excitación y nerviosismo?

Lo encontré increíblemente entrañable. No pude evitar el deseo de teñir hasta los rincones más recónditos de su cuerpo con mi color.

Mis manos subieron naturalmente a su pecho. Toqué suavemente sus pechos mientras acariciaba su nuca con mis labios, mi lengua y la punta de mi nariz.

"Huu".

Rose dejó escapar un pequeño suspiro mientras yo tocaba lenta y pacientemente sus dos picos. Los acaricié como si trasladara el calor de mis palmas a su pecho, y sus pezones rozaron mis dedos mientras lo hacía.

"Mm, mm… uu, ah…"

Parecía que esto era suficiente para estimular a Rose, ya que sus gemidos comenzaron a hacerse más fuertes en respuesta a mis caricias.

"¿Tiene cosquillas?" Pregunté en un tono ligeramente burlón.

Rose apartó la mirada avergonzada.

"… No tanto".

"Entonces puedo seguir tocándolas, ¿no?".

"Uu, ah… auh…"

Rose gimió suavemente mientras le lamía la clavícula y le frotaba el pecho. Ella rodeó mi espalda con sus brazos, cediéndome todo su cuerpo; así que puse más fuerza en mis caricias.

"Huu… ah, ah… Uuu… Claus…"

"¿Cómo es?"

"Se… Se siente bien… Hnn… Tu cuerpo se siente caliente…."

Sus frases se habían desordenado, y era incapaz de hablar correctamente.

Una vez más, la encontré extremadamente linda. No pude evitar las ganas de seguir provocándola.

"¿De verdad? Pero creo que es tu cuerpo el que está caliente".

"E-Eso es…"

"Aunque no estoy seguro. ¿Debo asegurarme entonces?"

Con una mirada burlona, miré directamente a los hermosos ojos negros de Rose.